sábado, 25 de agosto de 2012

El Retrete Corporativo


Cotidiano y Corporativo

La semana pasada tuve un problema con mi retrete casero. A pesar de ser una tortura su reparación, contaba con la ayuda económica de mi primo el millonario, para quien trabajo, que me dijo que en caso de dificultades que le avisase inmediatamente. El detalle radicaba en que él solicitaría el reembolso por la empresa y necesitaba que el "informe" que yo le pasase estuviera disimulado en términos corporativos.

Después de rascarme la barba por unos segundos, me senté en la PC y relaté mi problema, al fin resuelto, y la traducción que le pasé a mi primo.

El cuento


En casa:

Al fin se rompió el viejo y oxidado yerrito que sostenía el flotante de la poceta, luego de tanto doblarlo para ajustar la altura del agua en el tanque. Ya había comprado el FuidMaster hace unas semanas y lo tenía guardado porái, mientras agarraba determinación.



 Traducción corporativa para el primo:
"La plataforma operativa ya había cubierto las expectativas de rentabilidad de hace unos doce años. Incluso, ya se contaba con el nuevo producto, el cual vendría a solucionar, luego de su instalación, el problema de retraso en la actualización de los equipos. Simplemente el día a día era nuestro argumento para no acometer el cambio."

Estaba ya por cambiarlo, porque el bote de agua constante  gastaba mucha agua, y más en tiempos de racionamiento. Pero algo de flojera y por falta de un empujoncito, hizo que la rotura de la pieza iniciara el cambio del juego completo, por un juego completo, ya ni tan moderno, llamado FluidMaster.

"Ya se había comenzado a estructurar el proyecto de renovación tecnológica, dadas las nuevas condiciones a tomar en cuenta, la obsolescencia de los instrumentos, las regulaciones gubernamentales, etc. Una dosis determinante de negligencia y crisis de operación, al fin, hizo que el proyecto se retomase con mucho vigor, contactando inmediatamente un proveedor que satisficiera la necesidad."

Ayer sábado al fin me decidí a cambiar el juego viejo por el nuevo. Revisé bien que tuviese el papelito de las instrucciones, porque son muchos perolitos los que aparentan venir en esa caja y siempre es un lío si se pierde uno.

"Hace pocos días, se reunió el equipo designado para llevar a cabo la ejecución del proyecto, y el primer paso fue verificar la existencia de una documentación adecuada, así como los componentes modulares de la nueva plataforma para evitar traspiés durante el proceso."

Busqué las cajas de herramientas y las saqué en el baño. Llené un par de tobos con agua para bajar, en caso de que a alguien se antojara de ir al baño cuando la poceta estuviese desarmada.

"Se dispusieron las herramientas previstas, necesarias al equipo de trabajo para comenzar las tareas. Igualmente, se dispusieron los mecanismos de respaldos a utilizar, en caso necesario, durante el proceso."

Le dije a mi familia que me dejara tranquilo durante el fin de semana, que tenía que hacer lo de la poceta, que puede ser rápido, pero que uno nunca sabe.

"Se envió comunicación formal a los usuarios del servicio para considerar una ventana de tiempo de 48 horas, como máximo."

Quité la palanca que baja el agua, el resto del flotante, el tapón de goma, y cuando me disponía a desenroscar los tornillos que unían el tanque a la base me di cuenta de que el segundo tornillo era de metal y estaba oxidado. Eliminé el tornillo de plástico, pero se hacía imposible girar la tuerca, sobre todo porque la cabeza de ese tornillo estaba casi borrada por el agua.

"Se comenzó el proceso con el desensamblaje de los primeros elementos que componen la vieja plataforma. El proceso se ejecutó perfectamente en sus primera fase, pero en el penúltimo paso, se observó la inminencia de frenado en el proyecto: un módulo incompatible se había dañado y hacía imposible su remoción, lo cual detenía el proceso hasta que se solucionase la nueva situación."

Llamé a mi pana y le pregunté si tenía o sabía quién tenía una cizalla, y me respondió que eso era muy difícil, que mejor podía meterle una hoja de segueta, pelo a pelo. Lo intenté, pero había que apretar mucho con un trapo para darle, durante mucho tiempo y no se veía que la cosa fuese palante, a pesar del dolor en el dedo.

"Recurrí a dos asesores de confianza, presumiendo que teníamos figurada la solución. Ambos me sugirieron soluciones distintas a la propuesta por nuestro equipo, acogiendo la prueba con la primera de las propuestas recibidas: luego de varios intentos infructuosos, y observando que los resultados no se correspondían con el costo, desistimos."

Llamé a mi hermano y me dijo que no sabía de la cizalla, pero que podía hacerlo con un esmeril. Ya a esta hora de la tarde y con el malestar estomacal, dejé el trabajo para hoy, yendo a la ferretería en la mañana.

"El equipo decidió intentar con la segunda propuesta recibida, pero dadas algunas condiciones personales adversas, se tomó la decisión de aplazar el próximo paso para los días actuales."

En la mañana, con todo el fastidio, me fui a la ferretería que abre los domingos y busqué el esmeril: 360 bolívares. Viendo el precio y arrugando la cara, me fui a ver el precio de las cizallas: 135 bolívares, y 96 la de menor calidad. Por el uso que le daría a uno o a otro, me fui por la cizalla de menor calidad.

"Esta semana, con el letargo que produce interrumpir el proceso, y todavía dentro de la ventana de interrupción del servicio, el equipo acudió donde el proveedor del reemplazo del elemento problemático, obteniendo, luego de considerar el costo-beneficio, nos decidimos por la opción más económica, totalmente efectiva para los fines."

Muy entusiasmado, llegué a casa imaginando que sería como cortar un hilo y luego, los 20 minutos que debería llevarse cambiar el jueguito ese que me tenía verde.

"Con energías renovadas, acometimos las tareas para remover el módulo. Si solucionábamos el problema coyuntural y se daba paso a la tarea original, el proceso se reanudaría inmediatamente y podríamos continuar con la relativa facilidad que el equipo previó al detallar el proyecto."

Pues, al sacar la cizalla de mis sueños y tratar de meterla entre el tanque y la base, supe con mucho fastidio, que no alcanzaría el tornillo. El sudor corría tanto como ayer y cierta arrechera comenzó a salir. Por no dejar, probé un alicate de presión nuevo que había comprado hoy, y con el viejo, traté de desenroscar el tornillo uno milímetros más para que la cizalla entrase. Pero nada, y yo que creía que me la estaba comiendo.

"Pues, ante nuestra sorpresa, pudimos constatar que la herramienta recién adquirida no tenía el alcance esperado. Para no descartar ajustar algunas condiciones previas para poder utilizar la nueva herramienta correctamente, se reintentaron ajustes a elementos ya descartados, pero persistió la imposibilidad. En definitiva, el deseo de cooperar y la certeza en una nueva herramienta no basta para solucionar el problema."

Por último, pensé que si le quitaba la arandela de goma de la cabeza del tornillo para que bajara un poco y entrara la cizalla para cortar el tornillo de mierda.

"El equipo de trabajo, algo consternado por la nueva situación, se reunión en tormenta de ideas. En medio de la sesión, el más capaz de los analistas indicó que si se removían otros elementos de seguridad ya innecesarias para la plataforma futura, esto daría mayor espacio para utilizar la flamante, pero hasta ahora inútil herramienta."

Después de halar la gomita para un lado y para otro, con dos destornilladores planos y una pinza, la bicha cedió. Restaba verificar que la cizalla entrara en el sitio después de quitar la goma, entró.

"Comenzó el procedimiento de remoción de la seguridad mencionada, usando la síntesis y el análisis para extraer lo necesario. Después de dos o tres intervenciones, vimos removido el exceso mencionado. Después de una verificación simple, y luego de aplicar la nueva herramienta, se vislumbró la posibilidad de solución."

Aunque no entró hasta donde fuese más fácil, si se podía sentir que el tornillo estaba entre las pinzas. Hice un esfuerzo importante, y luego de fruncir la cara como hace mucho tiempo no, se escuchó el crujido del tornillo que saltó en sus dos pedazos.

"Aunque algunos aspectos previstos en la última sesión de trabajo no fueron cubiertos para la totalidad de la explotación de la herramienta, el resultado fue el esperado."

Quité el resto de las piezas, busqué la caja con el nuevo juego y después de leer el manualito, comencé a armar. Sólo fueron 10 minutos los que el resto del armado necesitó.

"Se acondicionó el sistema para colocar la nueva plataforma y se revisó de nuevo la documentación de ensamblaje, por si algún detalle había de considerarse. El programa o script de instalación corrió a la perfección, y en sólo unos minutos el producto fue instalado."

Con mucho cuidado y colocando teflón en las roscas, no utilizando mucha fuerza para apretar las tuercas, abrí la llave de paso de la poceta. Bajé dos veces y todo bien. Ajusté la altura del agua, y cuando limpiaba el reguero de agua pasada, me di cuenta de que en dos sitios derramaba: en la llave de paso (con una canilla recién puesta) y en uno de los tornillos de la base. Apreté los dos puntos y todo resultó como debía: nada botándose, nada goteando.

"Se levantó el servicio, en inmediatamente después de detectar y ajustar algunos puntos desalineados, nuestra nueva plataforma comenzó a andar perfectamente."

De verdad, espero que el primo entienda mi situación y me dé la plata para poder continuar este mes sin problemas.




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